AL PUBLICO EN GENERAL
Les escribo atentamente para hacerles saber de algunos de los abusos que se cometen en ING. METALURGICA de la UNSA en donde por ejemplo el señor director DANIEL SALVADOR SILVA ARCE no rinde cuentas de los 20 MIL SOLES recaudados de las “donaciones voluntarias que nos obligan a pagar BAJO COACCION de no firmar las fichas de matricula y obviamente no te puedes matricular” … y que nadie escucha nuestro clamor de protesta pues el DECANO hace oídos sordos a nuestra protesta y debemos cuidar nuestra identidad por miedo a la coacción proveniente de los docentes que hacen “espíritu de cuerpo” y cuando denuncias a alguno, todos los demás te “ajustan” y no te dejan salir de la universidad…
EL CASO DE HOY es una vergüenza total; el señor HENRY POLANCO CORNEJO (conocido por haber tenido a su cargo el CEPRUNSA y conocido por todos que vendía los puestos de ingreso bajo esta modalidad) es docente de un curso de 5to año llamado TECNOLOGIA DE METALES NO FERROSOS, este sujeto que toma exámenes con problemas que no tienen solución y preguntas que tienen doble respuesta (y que obviamente te corrige según su conveniencia) REPROBANDO a la totalidad de los alumnos y manda a su “chacal” IVAN USCA que es el encargado de pedir coimas a los alumnos para aprobar el curso, las mismas que van desde los 300 hasta los 800 SOLES dependiendo claro si es que estas jalado ó en ABANDONO…así es señores hasta los “muertitos” reviven gracias a estas dos lacras de la sociedad; al mismo tiempo en las clases de laboratorio demostraba toda su ignorancia gracias a que NINGUNO… ha leído bien ninguno de los experimentos de laboratorio le salió bien (esto debido a su escasa experiencia en el campo profesional…aunque cierto es que hay casos mas tristes en esta escuela de docentes –la mayoría- que cuentan con CERO AÑOS DE EXPERIENCIA en el campo profesional) y luego de fracasar en los experimentos de laboratorio tomo un “examen de practicas” que consistía en ejercicios sacados de otro curso que nada tenían que ver con el curso en cuestión… el resultado obvio : jalados de nuevo (esto en complicidad con su esbirro: JAVIER LAZARTE (CEVICHE)–sujeto que fue expectorado de un conocido instituto --HONORIO DELGADO-- de nuestra ciudad por incapaz y por corrupto-) y sigue mandando a su “chacal” IVAN USCA para que pida coimas a los alumnos porque EL CURSO ESTA DIFICIL.
Lo cierto es que el curso no es difícil, ellos lo HACEN DIFICIL para COBRAR COIMAS; acto seguido en el segundo examen sospechosamente se encontró a dos alumnos (conocidos por ser parroquianos de otros ingenieros y buenos pagadores) plagiando descaradamente… y saben que sucedió?... de Ripley ¡¡¡ HENRY POLANCO CORNEJO les devolvió el examen con una sonrisa de oreja a oreja y es mas ellos han sacado más nota que algunos de los que si estudiaron para el examen (claro indicio de que estos sujetos ya se “MATRICULARON” con el referido docente) y además han aparecido notas altas de sujetos que nunca entran a clases y que nadie los conoce ni en pintura … y hace los mismo en todos los cursos que le toca enseñar…
Este sujeto y muchos otros que fungen de docentes en esta escuela profesional ya han sido denunciados a través de medios radiales en incontables oportunidades pero la sociedad hace oídos sordos y las autoridades de la universidad no dicen nada por tener la misma línea política que los referidos maestros…
Enlaces de interés: (foros de denuncia de la corrupción y de cómo es llevar una carrera en algunas escuelas profesionales de la UNSA)
FUERZA HERMANOS DE LA UNSA: conocida página del sapito donde ya se han hecho varias denuncias acerca de los docentes de diversas escuelas profesionales de la UNSA:
www.elsapitodearequipa.blogspot.com
FUERZA HERMANOS DE METALURGIA …NO HAY MAL QUE DURE CIEN AÑOS: acerca de la corrupción en METALURGIA – UNSA:
www.vengadormetaloco.blogspot.com
FUERZA HERMANOS DE DERECHO…NO HAY MAL QUE DURE CIEN AÑOS: acerca de cómo se pagan los favores (de las alumnas a los maestros) en DERECHO – UNSA:
www.prostitucionunsaderecho.blogspot.com
Que los boten de la UNSA por galta de etica y moral, quien será el otro acusado en el juicio del Gato Rivera, cuidado Henrry
ResponderEliminarY TU CREES QUE MI PATA VALÑDEMAR VA A DEJAR QUE ME TOQUEN UNO DE LOS 4 PELOS QUE ME QUEDAN???
ResponderEliminarNO SEAS HUEVON....
DIME... YA LLEVASTE PIRO? ESTAMOS EN FINAL DE TEMPORADA, PAGAN 3 APRUEBAN 4.....
APROVECHEN LOS ULTIMOS DIAS DE LIQUIDACION...ANTES DE ENTREGAR PLANILLAS...
huevads e sctriben estudien mierdaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa meatlurgicos gilazos hacen quedar mal asu escula son gilazossssss .. MINAS es mejor
ResponderEliminarPor una universidad sin corrupción
ResponderEliminarEn la facultad de procesos existe la gran mafia donde los secretarios se han vuelto tramitadores
- El secretario Fernando de la escuela de metalúrgica se dedica a cobrar a los alumnos por sus trámites y descuida su labor como secretario
- El señor Roberto o (Robert)es otra de las joyitas quien se dedica o trabaja de tramitador quien cobra a los alumnos las cantidades de 800, 900, lo minimo500 por tramitar
En con vina del mafioso secretario de la facultad helar quien se le ha visto en muchas oportunidades recibiendo plata de alumnos desde hace tiempo atrás más parece que eso lo permite el decano pinocho y las dos secretarias la chata y la señora creo que se reparten el botín …
El secretario helar de la facultad recoge los expedientes incompletos cuando hay dinero él se preocupa mucho personalmente los agiliza pero cuando no hay dinero nos pone trabas que todavía no lo firmo y que el tramite demora y hasta los esconde o los traspapela al propósito nuestros expedientes. Pero cuando los tramitadores le llevan lo hacen como arte de magia rapidito .alguien debe de cambiar esto y (todavía quieren paro secretarios corruptos)
¡Votar esos corruptos!
¡Otro decano de metalúrgica que cambie la corrupción! Siiiiii……
Viva metalúrgica abajo la corrupción
Auditoria en la facultad
Abajo la corrupción
Jajaja como yo aprobe raopasndo y con esfuerzo pero aprobe ahora tengo un buen trabajo todo esta en la actitud que uno tiene estudien noma carajo como dice ese de ing Minas hacen quedar mal a la escuela
ResponderEliminarTRISTE LA REALIDAD DE LA UNSA EN METALURGIA INVOLUCION:::::::::::::::::::::
ResponderEliminarMetalurgistas por que no sacan lo del ing. Muñiz si ese “Dizque ing” es mas BURRO Y CORRUPTO, nadie sabe lo que hace ps aquí le va …. Le va por partes la involuconnnn
INVOLUCION 1
ResponderEliminarYa ing. MUÑIZ renuncia no te hagas el HUEVON . renuncieeeeeeeeeeeeee
1) Primer lugar no es Ing. METALURGICO
2) No es de la UNSA y es APRISTA hasta los huesos
3) Habla huevadas nada de metalurgia
4) Envía hacer trabajos de DISEÑO DE PLANTAS METALURGICAS (5 to año) por ejm. El trabajo que hicimos fue de 12 personas.
INVOLUCION 2
ResponderEliminar5) Nos costo hacer el trabajo 1340 soles ósea que cada alumno puso, 111,70 (ciento once con setenta céntimos)-
6) Bueno fueron algo de 10 a 15 grupos, ósea que cada grupo gasto aproximadamente 1200 soles en promedio.
INVOLUCION 3
ResponderEliminar7) Ahora multiplica 15 (grupos) x 1200 soles = 18000 (dieciocho mil soles)
8) Bueno de los cuales 10 grupos lo hicieron excelente los trabajos ósea un gasto de 12000 (doce mil nuevos soles)
INVOLUCION 4
ResponderEliminar9) Bueno aquí va el detalle, el ing. MUÑIZ los trabajos se los lleva… que son de los alumnos y que automáticamente pertenece a los alumnos que vendrán posteriormente y que puedan aprender según el.. Pero nada el ING. MUÑIZ se los lleva en su camioneta, acabando el semestre
INVOLUCION 5
ResponderEliminar10) Se los lleva con el pretexto de que lo va mejora y nunca regresan a al universidad, como nosotros ya llevamos el curso y nos vamos , ps nadie reclama y para el colmo el lo presenta a los mineros informales diciendo que EL LOS DISEÑO, que vergüenza yo lo vi en una mina informal estuve por casualidad.
PREGUNTE quien diseño este trabajo y los mineros informales me contestaron con miedo el ING: MUÑIZ., y me mate de risa fue tata lo cólera les conteste y dije este diseño es mió y de algunos amigos mas… ptm revente ,..
ESE se burro de ING: MUÑIZ y corrupto vende nuestro trabajos diciendo que el los hace que tal srs. Metalurgista eso si es corrupción y burrada
INVOLUCION 6
ResponderEliminar11) Ósea alumnos Metalurgista nuestro trabajo… aparte que nosotros lo hacemos los vende y si nos costo por ejm. 1000 , 1200 o 1500 soles, el los llega a vender como su diseño y como si hubiera hecho EL.. lo llega a vender en 3 a 4 veces el precio ósea si nos costo a nosotros 1000 soles lo vende en 3000 o 3500 soles, y si nos costo 1500 soles los vende en 5000 a 6000 soles …. y si funciona eso diseños, nos por gusto nos enseñaron otros cursos y aplicamos la metalurgia
Ahora juzguemos quienes son los corruptos carajo ya metalurgistas botemos a los corruptos y burros, primeros a los burros y de ahí a los corruptos.
INVOLUCION 7 ……
ResponderEliminariNG. Muñiz – Charlatan . APRISTA - Pedante – MENTIROSO haces quedar mal a los cusqueños .. FUERRAA FUERRAA MIERDDAAAA MIERRDAAA
mierda fuera…………….
SALMO 8
ResponderEliminarPoder del nombre divino
1 Del maestro de coro. Según la... de Gat. Salmo. De David.
2 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Tú que asientas tu majestad sobre los cielos,
3 por boca de chiquillos, de niños de pecho,
cimentas un baluarte frente a tus adversarios,
para acabar con enemigos y rebeldes.
4 Al ver tu cielo, hechura de tus dedos,
la luna y las estrellas que pusiste,
5 ¿qué es el hombre para que te acuerdes de él,
el hijo de Adán para que de él te cuides?
6 Apenas inferior a un dios lo hiciste,
coronándolo de gloria y esplendor;
7 señor lo hiciste de las obras de tus manos,
todo lo pusiste bajo sus pies:
8 ovejas y bueyes, juntos,
y hasta las bestias del campo,
9 las aves del cielo, los peces del mar
que circulan por las sendas de los mares.
10 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!SALMO 8
Poder del nombre divino
1 Del maestro de coro. Según la... de Gat. Salmo. De David.
2 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Tú que asientas tu majestad sobre los cielos,
3 por boca de chiquillos, de niños de pecho,
cimentas un baluarte frente a tus adversarios,
para acabar con enemigos y rebeldes.
4 Al ver tu cielo, hechura de tus dedos,
la luna y las estrellas que pusiste,
5 ¿qué es el hombre para que te acuerdes de él,
el hijo de Adán para que de él te cuides?
6 Apenas inferior a un dios lo hiciste,
coronándolo de gloria y esplendor;
7 señor lo hiciste de las obras de tus manos,
todo lo pusiste bajo sus pies:
8 ovejas y bueyes, juntos,
y hasta las bestias del campo,
9 las aves del cielo, los peces del mar
que circulan por las sendas de los mares.
10 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
SALMO 8
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1 Del maestro de coro. Según la... de Gat. Salmo. De David.
2 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Tú que asientas tu majestad sobre los cielos,
3 por boca de chiquillos, de niños de pecho,
cimentas un baluarte frente a tus adversarios,
para acabar con enemigos y rebeldes.
4 Al ver tu cielo, hechura de tus dedos,
la luna y las estrellas que pusiste,
5 ¿qué es el hombre para que te acuerdes de él,
el hijo de Adán para que de él te cuides?
6 Apenas inferior a un dios lo hiciste,
coronándolo de gloria y esplendor;
7 señor lo hiciste de las obras de tus manos,
todo lo pusiste bajo sus pies:
8 ovejas y bueyes, juntos,
y hasta las bestias del campo,
9 las aves del cielo, los peces del mar
que circulan por las sendas de los mares.
10 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!SALMO 8
Poder del nombre divino
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2 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Tú que asientas tu majestad sobre los cielos,
3 por boca de chiquillos, de niños de pecho,
cimentas un baluarte frente a tus adversarios,
para acabar con enemigos y rebeldes.
4 Al ver tu cielo, hechura de tus dedos,
la luna y las estrellas que pusiste,
5 ¿qué es el hombre para que te acuerdes de él,
el hijo de Adán para que de él te cuides?
6 Apenas inferior a un dios lo hiciste,
coronándolo de gloria y esplendor;
7 señor lo hiciste de las obras de tus manos,
todo lo pusiste bajo sus pies:
8 ovejas y bueyes, juntos,
y hasta las bestias del campo,
9 las aves del cielo, los peces del mar
que circulan por las sendas de los mares.
10 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
SALMO 8
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2 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Tú que asientas tu majestad sobre los cielos,
3 por boca de chiquillos, de niños de pecho,
cimentas un baluarte frente a tus adversarios,
para acabar con enemigos y rebeldes.
4 Al ver tu cielo, hechura de tus dedos,
la luna y las estrellas que pusiste,
5 ¿qué es el hombre para que te acuerdes de él,
el hijo de Adán para que de él te cuides?
6 Apenas inferior a un dios lo hiciste,
coronándolo de gloria y esplendor;
7 señor lo hiciste de las obras de tus manos,
todo lo pusiste bajo sus pies:
8 ovejas y bueyes, juntos,
y hasta las bestias del campo,
9 las aves del cielo, los peces del mar
que circulan por las sendas de los mares.
10 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!SALMO 8
Poder del nombre divino
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2 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Tú que asientas tu majestad sobre los cielos,
3 por boca de chiquillos, de niños de pecho,
cimentas un baluarte frente a tus adversarios,
para acabar con enemigos y rebeldes.
4 Al ver tu cielo, hechura de tus dedos,
la luna y las estrellas que pusiste,
5 ¿qué es el hombre para que te acuerdes de él,
el hijo de Adán para que de él te cuides?
6 Apenas inferior a un dios lo hiciste,
coronándolo de gloria y esplendor;
7 señor lo hiciste de las obras de tus manos,
todo lo pusiste bajo sus pies:
8 ovejas y bueyes, juntos,
y hasta las bestias del campo,
9 las aves del cielo, los peces del mar
que circulan por las sendas de los mares.
10 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!SALMO 8
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2 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Tú que asientas tu majestad sobre los cielos,
3 por boca de chiquillos, de niños de pecho,
cimentas un baluarte frente a tus adversarios,
para acabar con enemigos y rebeldes.
4 Al ver tu cielo, hechura de tus dedos,
la luna y las estrellas que pusiste,
5 ¿qué es el hombre para que te acuerdes de él,
el hijo de Adán para que de él te cuides?
6 Apenas inferior a un dios lo hiciste,
coronándolo de gloria y esplendor;
7 señor lo hiciste de las obras de tus manos,
todo lo pusiste bajo sus pies:
8 ovejas y bueyes, juntos,
y hasta las bestias del campo,
9 las aves del cielo, los peces del mar
que circulan por las sendas de los mares.
10 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
SALMO 8
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1 Del maestro de coro. Según la... de Gat. Salmo. De David.
2 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Tú que asientas tu majestad sobre los cielos,
3 por boca de chiquillos, de niños de pecho,
cimentas un baluarte frente a tus adversarios,
para acabar con enemigos y rebeldes.
4 Al ver tu cielo, hechura de tus dedos,
la luna y las estrellas que pusiste,
5 ¿qué es el hombre para que te acuerdes de él,
el hijo de Adán para que de él te cuides?
6 Apenas inferior a un dios lo hiciste,
coronándolo de gloria y esplendor;
7 señor lo hiciste de las obras de tus manos,
todo lo pusiste bajo sus pies:
8 ovejas y bueyes, juntos,
y hasta las bestias del campo,
9 las aves del cielo, los peces del mar
que circulan por las sendas de los mares.
10 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!SALMO 8
Poder del nombre divino
1 Del maestro de coro. Según la... de Gat. Salmo. De David.
2 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Tú que asientas tu majestad sobre los cielos,
3 por boca de chiquillos, de niños de pecho,
cimentas un baluarte frente a tus adversarios,
para acabar con enemigos y rebeldes.
4 Al ver tu cielo, hechura de tus dedos,
la luna y las estrellas que pusiste,
5 ¿qué es el hombre para que te acuerdes de él,
el hijo de Adán para que de él te cuides?
6 Apenas inferior a un dios lo hiciste,
coronándolo de gloria y esplendor;
7 señor lo hiciste de las obras de tus manos,
todo lo pusiste bajo sus pies:
8 ovejas y bueyes, juntos,
y hasta las bestias del campo,
9 las aves del cielo, los peces del mar
que circulan por las sendas de los mares.
10 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!SALMO 8
Poder del nombre divino
1 Del maestro de coro. Según la... de Gat. Salmo. De David.
2 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Tú que asientas tu majestad sobre los cielos,
3 por boca de chiquillos, de niños de pecho,
cimentas un baluarte frente a tus adversarios,
para acabar con enemigos y rebeldes.
4 Al ver tu cielo, hechura de tus dedos,
la luna y las estrellas que pusiste,
5 ¿qué es el hombre para que te acuerdes de él,
el hijo de Adán para que de él te cuides?
6 Apenas inferior a un dios lo hiciste,
coronándolo de gloria y esplendor;
7 señor lo hiciste de las obras de tus manos,
todo lo pusiste bajo sus pies:
8 ovejas y bueyes, juntos,
y hasta las bestias del campo,
9 las aves del cielo, los peces del mar
que circulan por las sendas de los mares.
10 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
SALMO 8
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2 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Tú que asientas tu majestad sobre los cielos,
3 por boca de chiquillos, de niños de pecho,
cimentas un baluarte frente a tus adversarios,
para acabar con enemigos y rebeldes.
4 Al ver tu cielo, hechura de tus dedos,
la luna y las estrellas que pusiste,
5 ¿qué es el hombre para que te acuerdes de él,
el hijo de Adán para que de él te cuides?
6 Apenas inferior a un dios lo hiciste,
coronándolo de gloria y esplendor;
7 señor lo hiciste de las obras de tus manos,
todo lo pusiste bajo sus pies:
8 ovejas y bueyes, juntos,
y hasta las bestias del campo,
9 las aves del cielo, los peces del mar
que circulan por las sendas de los mares.
10 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!SALMO 8
Poder del nombre divino
1 Del maestro de coro. Según la... de Gat. Salmo. De David.
2 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Tú que asientas tu majestad sobre los cielos,
3 por boca de chiquillos, de niños de pecho,
cimentas un baluarte frente a tus adversarios,
para acabar con enemigos y rebeldes.
4 Al ver tu cielo, hechura de tus dedos,
la luna y las estrellas que pusiste,
5 ¿qué es el hombre para que te acuerdes de él,
el hijo de Adán para que de él te cuides?
6 Apenas inferior a un dios lo hiciste,
coronándolo de gloria y esplendor;
7 señor lo hiciste de las obras de tus manos,
todo lo pusiste bajo sus pies:
8 ovejas y bueyes, juntos,
y hasta las bestias del campo,
9 las aves del cielo, los peces del mar
que circulan por las sendas de los mares.
10 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!SALMO 8
Poder del nombre divino
1 Del maestro de coro. Según la... de Gat. Salmo. De David.
2 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Tú que asientas tu majestad sobre los cielos,
3 por boca de chiquillos, de niños de pecho,
cimentas un baluarte frente a tus adversarios,
para acabar con enemigos y rebeldes.
4 Al ver tu cielo, hechura de tus dedos,
la luna y las estrellas que pusiste,
5 ¿qué es el hombre para que te acuerdes de él,
el hijo de Adán para que de él te cuides?
6 Apenas inferior a un dios lo hiciste,
coronándolo de gloria y esplendor;
7 señor lo hiciste de las obras de tus manos,
todo lo pusiste bajo sus pies:
8 ovejas y bueyes, juntos,
y hasta las bestias del campo,
9 las aves del cielo, los peces del mar
que circulan por las sendas de los mares.
10 ¡Yahvé, Señor nuestro,
qué glorioso es tu nombre en toda la tierra!
SALMO 11
ResponderEliminar(10)
Confianza del justo
1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
(11)
Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
(12)
Clamor confiado
1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
SALMO 11
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Confianza del justo
1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
(11)
Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
(12)
Clamor confiado
1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
SALMO 11
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Confianza del justo
1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
(11)
Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
(12)
Clamor confiado
1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
SALMO 11
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Confianza del justo
1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
(11)
Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
(12)
Clamor confiado
1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
SALMO 11
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Confianza del justo
1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
(11)
Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
(12)
Clamor confiado
1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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Confianza del justo
1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
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Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
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1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
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Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
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Clamor confiado
1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
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1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
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Clamor confiado
1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
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1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
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1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
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Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
(12)
Clamor confiado
1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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Confianza del justo
1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
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Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
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2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
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2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
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2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
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Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
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2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
(11)
Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
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Clamor confiado
1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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Confianza del justo
1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
(11)
Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
(12)
Clamor confiado
1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
SALMO 11
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Confianza del justo
1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
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Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
(12)
Clamor confiado
1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
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Contra el mundo mentiroso
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2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
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2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
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2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
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2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
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Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
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2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
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2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
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2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
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1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
(12)
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2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
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2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
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2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
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2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
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2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
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En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
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2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
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2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
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Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
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2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
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En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
(11)
Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
(12)
Clamor confiado
1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
SALMO 11
ResponderEliminar(10)
Confianza del justo
1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
(11)
Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
(12)
Clamor confiado
1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
SALMO 11
ResponderEliminar(10)
Confianza del justo
1 Del maestro de coro. De David.
En Yahvé me cobijo; ¿cómo, pues, me decís:
«Huye, pájaro, a tu monte,
2 que los malvados tensan su arco,
ajustan a la cuerda su saeta,
para disparar en la sombra contra los honrados?
3 Si están en ruinas los cimientos,
¿qué puede hacer el justo?».
4 Yahvé en su santo Templo,
Yahvé en su trono celeste;
sus ojos ven el mundo,
sus pupilas examinan a los hombres.
5 Yahvé examina al justo y al malvado,
odia al que ama la violencia.
6 ¡Lluevan sobre el malvado brasas y azufre,
y un viento abrasador como porción de su copa!
7 Pues Yahvé es justo y ama la justicia,
los rectos contemplarán su rostro.
SALMO 12
(11)
Contra el mundo mentiroso
1 Del maestro de coro. En octava. Salmo. De David.
2 ¡Sálvanos, Yahvé, que escasean los fieles,
que desaparece la lealtad entre los hombres!
3 Falsedades se dicen entre sí,
con labios melosos y doblez de corazón.
4 Acabe Yahvé con los labios melosos,
con la lengua que profiere bravatas,
5 los que dicen: «La lengua es nuestra fuerza,
nuestros labios nos defienden, ¿quién será nuestro amo?».
6 Por la opresión del humilde, por el gemido del pobre,
me voy a levantar, dice Yahvé,
a poner a salvo a quien lo ansía.
7 Las palabras de Yahvé son palabras limpias,
plata pura a ras de tierra, siete veces purgada.
8 Tú, Yahvé, nos guardarás,
nos librarás de esa gente para siempre;
9 los malvados que nos rodean se irán,
colmo de vileza entre los hombres.
SALMO 13
(12)
Clamor confiado
1 Del maestro de coro. Salmo. De David.
2 ¿Hasta cuándo, Yahvé? ¿Me olvidarás para siempre?
¿Hasta cuándo me ocultarás tu rostro?
3 ¿Hasta cuándo andaré angustiado,
con el corazón en un puño día y noche?
¿Hasta cuándo me someterá el enemigo?
4 ¡Mira, respóndeme, Yahvé Dios mío!
Da luz a mis ojos, no me duerma en la muerte,
5 no diga mi enemigo: «¡Le he podido!»,
no se alegre mi adversario al verme vacilar.
6 Pues yo confío en tu amor,
en tu salvación goza mi corazón.
¡A Yahvé cantaré por el bien que me ha hecho,
tañeré en honor de Yahvé, el Altísimo!
Corrupción en la facultad
ResponderEliminarPor una universidad sin corrupción
En la facultad de procesos existe la gran mafia donde los secretarios se han vuelto tramitadores
- El secretario Fernando de la escuela de metalúrgica se dedica a cobrar a los alumnos por sus trámites y descuida su labor como secretario
- El señor Roberto Quispe o (Robert trabajador administrativo )es otra de las joyitas quien se dedica o trabaja de tramitador quien cobra a los alumnos las cantidades de 800, 900, lo minimo500 por tramitar
En con vina del mafioso secretario de la facultad helar quien se le ha visto en muchas oportunidades recibiendo plata de alumnos desde hace tiempo atrás más parece que eso lo permite el decano pinocho y las dos secretarias la chata y la señora creo que se reparten el botín …
El secretario helar de la facultad recoge los expedientes incompletos cuando hay dinero él se preocupa mucho personalmente los agiliza pero cuando no hay dinero nos pone trabas que todavía no lo firmo y que el tramite demora y hasta los esconde o los traspapela al propósito nuestros expedientes. Pero cuando los tramitadores le llevan lo hacen como arte de magia rapidito .alguien debe de cambiar esto
En varias oportunidades se le ve a ese ladronzuelo en las parrilladas tomando y ablando de repartirse el dinero con su patasa Robert Quispe trabajador administrativo y con una flaca también trabajadora de la facultad eso en horas de trabajo que joyitas no? ….
Y (todavía quieren paro secretarios corruptos)
¡Votar esos corruptos!
¡Otro decano de metalúrgica que cambie la corrupción! Siiiiii……
Viva metalúrgica abajo la corrupción
Auditoria en la facultad
Abajo la corrupción
yo opino jeje......que me da risa todo esto
ResponderEliminarmmmmm da la impresion que el q creo esta pagina es un incompetente creo que metalurgica no es para ti creo que das mas para sistemas .....te equivocastes de carrera ....... y si es cierto hay corrupcion en esta escuela de la cual yo tmb soy alumno ..... se muy bien las injusticias q cometen estos supuestos docentes ... pero q haya corrupcion en la escuela es por culpa de nosotros todos los alumnos de esta facultad..... ya dejense de huevadas ... solo estudiando podemos callar las huevadas que algunos docentes dicen en clase ...... mis respetos a los que si enseñan de verdad y todos sabemos quienes son .... este no es un colegio estamos en una universidad ..... es tiempo de comportarnos como universitarios .....y como futuros ingenieros ........... dejen de estar denigrando esta facultad que es nuestra esuela ..... por q los unicos a quien afecta esto es a nosotros los alumnos ...... porque niguna empresa ninguna mina ni otra entidad de procesos metalurgicos va a querer a ingenieros que pagan ......... ya dejen esa huevada del pokar, taco ,etc ... por q ustedes son los primeros que se quejan........
ResponderEliminar------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
ResponderEliminarel vengador metaloco ........ esta cagando verde
ResponderEliminarbueno propuests pAra el nuevo decano
ResponderEliminar1.- Ceviche
2.- Peter (pitbull)
3.- DERLY ZAVALA
4.- CERVATES
5.- CESAR APAZA MENESES
6.- iNGENEBRIO mUÑIZ
7.- INGENEBRIO VELIZ
8.- INGENEBRIO caRDENAS (EL REGRESO DEL CUCHILLO)
9.- SECRETARIA FERNADO (daniela romo)
10.- Robert quispe (trabajador administrativo mejor dicho vago demierda)
escojan uds. voten y marquenn por el nuevo decano
1) 2) 3) 4) 5) 6) 7) 8) 9) 10)
elijan uds. yo voto porr el 5) jejejjeje
preguntele quien es ese huevon
oye huevon de mierda , el dia que sepa quien eres tu, te recomendaria que te vayas ha trabajar a la luna porqque en Peru te cagastes tu y tu mancha, la mineria es chica y todos nos conocemos
ResponderEliminarmuchachos xq enojarse si estudias no tienes xq pagar pss pero si tas con 9 y tas pidiendo favor a q te aprueben ia pss no jodas....
ResponderEliminarlos de minas que me la chupen, si no quieren que me la sigan chpando
ResponderEliminara toda esta gente .. compañeros metalurgistas ya dejen de joder quieren cambiar y siguen pagando.. estudia busca practicas incompetente que pierdes tu tiempo haciendo berrinches.. te aseguro q en tu vida has leido un libro entero de metalurgica.. ponte a leer y deja de estar jodiendo.. asi no llegaras lejos
ResponderEliminarmetalurgista que sale de la unsa son metalurgista que nisiquiera saben cual es su funcion en el campo laboral les habla una egresado de la facultad de metalurgia de la unsa yo aprendi en el campo laboral grasias alos ing que trabajaron con mi persona. yo en la unsa lo unico que aprendi que ahi se tiene que pagar para aprobar los cursos
ResponderEliminardaniel carcaman sigues enseñando cinetica de reacciones en todos los cursos es lo unico que sabes. pedro pablo zea sigues pidiendo un tarjeta pa tu cel para aprobar a las personas que estaban apunto de aprobar su curso.ascuña sigues pidiendo tu coima en por electro y creo que te deben todavia ,tenias la grasias de recibir en dos parte. pedro mamani sigues con las polladas(la verdad nose como puedes ser un docente porque nisiquiera sabes donde estas parado).
ResponderEliminarde echo todo esto es patetico y muy triste a la vez q pena es una verdadera lastima la realidad de nuestra universidad x ahi lei la mineria es chica??? eso es mediocre pobre perdedor q dijo eso y q todos se conocen vaya... bno hay cosas q causan verguenza ajena pero esto es para llorar o muy muy indignante y a los q dijeron estudia mierda a ellos mis respetos uds llegaran lejos y uds corruptos q se defienden unos a otros como le hacen ah? q les dicen a sus hijos cuando seas frandes seras como yo ?? jaja viejitos decrepitos con un pie en la tumba dan mucha mucha lastima
ResponderEliminarpobres frustrados q mas les queda pobres incapaces dignos representantes de los mediocres a ellos uds corruptos xq no se largan si no pudieron xq quieren seguir denigrando a la unsa al menos vayanse de este mundo reparando sus actos o gananse sus ultimos respetos xd xd de seguro cuando uds caminan lo univos q escuchan es ahi va ese "ignorante corrupto mediocre incapaz sinverguenza feo gordo burro ,etc,etc,etc " vamoss vamoss salgan de su cajita en la cual se encuentran sumidos slagan de ahi hay un mundo x descubrir x si no lo sabian
ResponderEliminarSoy de la EPIM y que pena todo lo que leo.
ResponderEliminar1. Por ahi dijeron..."estudien (..)ajo"---> Muy bien
2. Los groseros, que se vayan de donde salieron, no se necesita de tanta groseria para reflejar lo que son. Pero, que se puede esperar de quienes salieron de la realidad a la que no somos ajenos?
3. Profes que cobran?---> c/u con tarifa mas alta que el otro.
4. Es novedad que caurcausto, el indio zea (con ganas indio y cholo), muñiz, etc...aqui junto a los indios!!.Peor, lo de muñiz, no es novedad...desde siempre y OJO, es la ultima chupadita del mango...
5. el gato rivera que se peleaba con lozada para cobrar mas y el otro se molestaba porque desfinanciaba a los estudiantes. Peor, el gato se dedicaba a asechar sexualmente a cuanta cachimbita ingresaba.
6. Me asombra lo que dicen de Polanco y Ascuña. En mis tiempos, se aprendia algo de ellos. Y, los cursos de Electro y Piro eran papayita y hasta ahora guardo y aplico lo aprendido. Pero que ahora pongan tarifa???...una pena.
6. de los inges de ahora, no los conozco. Pero, segun leo, uo peor que el otro.
7. Por alli alguien dijo, que al pasar lo unico que escucharan: ahi pasa ese vagazo, burro sin sangre en la cara...es lo que pensaba de muñiz, zea y carcausto cuando hasta el 2008 iba por la EPIM y morados de la verguenza, no daban cara ni siquiera para una mirada de desprecio.
8. Lo de Fernando, una pena...es la persona mas amable y servicial desde que lo conoci.
Culpa tenemos todos los estudiantes y egresados,por no hacer nada para que cambie. Hagamos algo colegas, nuestro prestigio tiene que volver a ser como cuando lo dejaron todos los que si sobresalieron y ahora ocupan cargos estrategicos.
Con comentarios como los de arriba, solo ponen un punto rojo negativo al que egresa, egreso y egresara de la EPIM.
Tampoco llegar al extremo de bannear la biblia entera, soy creyente...pero lo que se exagera solo causa colera, rabia.
A partir de ahora...critiquemos y aportemos constructivamente y ayudemos a todo aquel joven que tambien se enlista en lo que para mi es el pilar de todas las ingenierias...La Ingenieria Metalurgica.....100% Metalurgista
calla hijo de la gran perra concha de tu puta madre mal parido
ResponderEliminarQUE PENA CEVICHE, PERO TOMEMOLOS POR EL BUEN CRITERIO YA TE CONPRASTE UN TERNO PA TUS CLASES MAESTRAS, EN EL INSTITUTO HDE TU SOLO ENSEÑASTE MATEMATICAS Y TODAVÍA MAL POR NO DECIRTE PESIMO
ResponderEliminarSIGUEN COMO INGENIEROS EL CARE BOLSA MEDINA, EL HUACHIMAN CALIZAYA EL QUESO ZEA Y EL SEBISI DEL CARCAUSTO QUE PENA DEBE REGENERARSE TODO ESTE PERSONAL.
La verdad yo lleve piro y tecno con el polanco y aprove sin pagar, solo estudiando, lo de las coimas es cierto, pero solo podran salir de ahi si se dedican a estudiar.
ResponderEliminarptm no entiendo como esos profesores burros pueden enseñarnos
ResponderEliminardan verguenza mierda.......aweban
no parecen ingenieros
si amigos estudiantes metalurgistas tenemos q criticar constructivamente , aunqe cuando veo al hijo de fernando (secretario) aprobando los cursos como si nada sin entrar a ninguna clase de los cursosmas q es un ignorante.
ResponderEliminarpuuuxa zoy de primer año rezien y veo q va eztar difizil terminar la carrera....... waaaa.....creo q mejor me kito nomaz...-.-!
ResponderEliminarhola.. t escribe un estudiante de ing metalurgica. acabo de terminar 4to año. y paso para 5toco
ResponderEliminary saben.. de q haya corrupcion si lo hay, pero bien por el chico de arriba q dice q estudiando le aprobo a polanco...
a ver tu q estas ya por los ultimos años.. mirate, y preguntate si en verda has estudiado y despues de ello un ing te jalo?? nada de nada. io hasta ahora no pague ningun curso ni pagare.
y ya pase porla mayoria de esos ing q tiene razon son basura, pero tu donde quedas.. tb como basura??. si yo pude y este año q me falta podre,, tu tb puedes salir limpio sin necedidad de dar 10 centimos a un ingniero... ahora es cosa otra el hecho de q tu noquieras estudair y quieras pagar. eso es tu problema, y mas verguenza dan ustedes quienes pagan... a ustedes si los considero basura.
bien dicho
EliminarPara empezar, la denuncia esta bien, para erradicar la corrupcion se comienza con la denuncia, ahora se tiene que presentar las acciones a seguir, y lo mas importante monitorear esas acciones. No es imposible acabar con la corrupcion, pienso que la solucion no es botarlos, ¡ ES CONVERSAR Y SOLUCIONAR¡. Amigos estudiantes, en sus manos esta que nuestra escuela vire en la apreciacion que tienen las demas Facultades y publico en general. Presionemos a nuestros dirigentes estudiantiles para que nuestros alcances acerca de la corrupcion existente, se defina en una solucion, monitoriemos nuestro pliego de reclamos.
ResponderEliminarPor otro compañeros metalurgistas, esta claro que la corrupcion se da en todas las instancias a nivel nacional, en nuestra generacion esta el valor de hacer cambiar el sistema, eso se va lograr con estudio, piensen que estan sentados dentro de la seleccion de un grupo priveligiado. Aprovechen al maximo el tiempo que les toca como estudiantes en todos los aspectos.
Y A USTEDES SEÑORES PROFESORES, DOCENTES, SE QUE NO SON TODOS, PERO YA DEJEN SE DE HUEVADAS, EN SUS MANOS ESTA EL FORMAR NO SOLO PROFESIONALES;SI NO, PROFESIONALES CON VALORES Y VIRTUDES, HAGAN QUE ESTAS GENERACIONES SE EXPLOTEN NO SOLO EN LO QUE SE REFIRE A CONOCIMIENTOS, QUE NO LO ES TODO, SI NO QUE SE RESCATEN COMO PERSONAS ILUSTRES E INTACHABLES QUE POR ESO UN SER HUMANO PASA A LA HISTORIA.
¡ VIVA INGENIERIA METALURGIA¡